Moderno Total 2

Estimados lectores, esta mañana me he reunido con el ministro Solbes y hemos acordado un rápido plan de acción para terminar con la crisis de una vez por todas.
Mediante la aplicación de este programa económico predecimos una recuperación económica para el mes de Noviembre de este año.En resumen, la solución consiste en fabricar ollas. Ollas y ollas.

Esto lo haremos mediante la creación de innumerables fábricas de ollas financiadas con capital público.
En estas fábricas de ollas habrá un gran número de trabajadores fabricando ollas día y noche. Asímismo, se hará obligatorio para todas las personas del país comprar ollas constantemente. Por la mañana, al mediodía, por la tarde... llenar la casa de ollas, y periódicamente lanzar a la basura las ollas seminuevas para comprar aún más ollas.
Las ollas lanzadas serán recicladas para la fabricación de más ollas, evitándose así la aparición de innumerables "cementerios de ollas" que podrían llegar a llenar el país.

Los ciudadanos deberán cumplir con la compra de una cuota diaria de ollas que se marcará regularmente desde la administración (por parte del Ministerio de Fabricación de Ollas). Esta cuota permitirá un constante flujo de demanda cada vez más creciente de ollas, donde la necesidad de ollas será siempre superior a la cantidad de ollas producida, de tal manera que la escasez producida garantice siempre un necesario aumento de la producción ollil.

Siempre será necesario abrir más fábricas de ollas y emplear a más gente en la fabricación de ollas.Con este nuevo sistema económico basado en las ollas, no habrá ningún tipo de problema de crisis, ya que toda anomalía en el sistema económico se solventará fácilmente produciendo una mayor demanda de ollas gracias a esta cuota de ollas.

FUTURO
En breve tiempo habremos creado una floreciente indústria de ollas que suministrará constamente ollas a todo el país, ávido de consumir ollas. Esto producirá una gran bajada del desempleo, en primer lugar porque todo el mundo estará fabricando ollas.

En segundo, porque a su vez los trabajadores gastarán el sueldo que ganen mediante el trabajo en la fábrica de ollas en otros elementos, como por ejemplo estanterías para almacenar ollas, servicio de transporte de ollas a domicilio para cumplir con la cuota de compra de ollas asignada, comida para poder mantenerse vivos y seguir fabricando ollas, escuelas que proporcionen a los jóvenes los conocimientos adecuados para su prometedor trabajo en la fabricación de ollas, etc.
creando así mayor necesidad de empleo, para sustentar a toda esa población fabricante de ollas.Esto producirá enormes cambios en nuestra sociedad, ya que la fabricación de ollas se verá como un negocio estable y seguro, y no tardarán las familias en apoyar y aconsejar a sus hijos que busquen un empleo en el prometedor negocio de las ollas, en una era, la era de las ollas, que comienza ahora y que no tendrá fin.

Cabe decir que algunos críticos han mencionado la posibilidad de que esto genere la creación una peligrosa "burbuja ollística" que podría llegar a estallar paralizando todo el sistema económico, que se traduciría en una destrucción del tejido económico, pero la constante y regulada necesidad de más y más ollas harán que la posibilidad del estallido de esta burbuja ollística sea remota, sino imposible, gracias a el control férreo de esta forma artificial de creación de escasez (la cuota diaria de ollas) por parte de las instituciones del Estado.
Además la ciencia económica ha demostrado que las burbujas no existen.