martes, 29 de junio de 2010

La Odisea, parte 2

En anteriores episodios…
Ulises lleva años atrapado en la isla del placer y el folleteo eterno, incapaz de escapar (…).
Mientras tanto, en Ítaca, los 108 pretendientes con mente colmena de Penélope están destruyendo todos los recursos naturales de la isla, ¡son una jodida plaga de langostas!
... Y ahora, la continuación:

CANTO SECONS
Es un poco curioso que el primer problema medioambiental en que los griegos pensasen fuese un montón de ricachones quedándose toda la comida y ensuciándolo todo, aunque viendo el futuro (los vertidos de petróleo de BP, etc…) quizá tenían razón... ¡Los ricachones son el verdadero problema del cambio climático, no las emisiones de CO2!

No había manera de convencerles de que se fueran. Insistían en que Penélope les había prometido que cuando acabase de coser un vestido que estaba haciendo, se casaría con alguno de ellos. (En realidad, no estaba cosiendo nada, pero ella decía que era un vestido que solo los listos podían ver… no, espera, uhm... Eso es otro cuento).

El caso es que Telémaco, harto de que ver su casa invadida por un montón de holgazanes en busca de una MILF, se reúne en una asamblea con el pueblo de Ítaca, para decidir cómo pueden echarles de allí.

“¡Yo digo que pillemos unas cuantas armas y les destripemos a todos”, dice uno de los ancianos de Ítaca, cuyo nombre era… euh… ¿dije nombre? No, no tenía. Muchos asienten ante este elaboradísimo plan, pero otros están preocupados por las represalias de los familiares y amigos de los poderosos pretendientes. El anciano tiene respuesta para todos: “A ellos, también los destripamos”.
No, amigos, no se está refiriendo a asesinar también a los familiares que busquen represalias, sino a los que no están de acuerdo con él en ese mismo instante… Y la verdad es que no se puede negar que su lógica es infalible.

“Oye”, le contesta Telémaco, “esa es tu solución para todo. Suben los impuestos, acuchillamos al cobrador. El pescadero se queda sin pescado, lo acuchillamos... ¡Lo creas o no, no se puede solucionar todo matando!”
“¿Qué no…? Querido niño, déjame que te convenza al estilo grieg…”, dice el anciano, avanzando hacia Telémaco con una navaja en la mano, con intenciones poco amigables.
A medio camino, gracias a los dioses, se tropieza con una piedra y cae al suelo. “Ay!”, dice.
“Piedra insolente, ¡prueba la aniquilación!” grita a continuación, apuñalándola en diversas ocasiones. ¡Así aprenderían esas putas piedras a apartarse de su camino!

Visto lo visto, Telémaco llega a la única conclusión lógica, que seguramente ya habréis deducido: navegar hasta la isla de Pilos y entrevistarse con el rey Néstor.

CANTO TERCERS
El Rey Néstor fue un antiguo compañero de guerra de Ulises, por lo que Telémaco le pregunta qué fue de su padre al salir de Troya. Nestor le responde sin ningún tipo de rodeo, yendo directamente al grano:

“La guerra de Troya…”, así habla Néstor, “allí murieron muchos hombres. Patroclo, que le robó la armadura a Aquiles, Aquiles, que murió tratando de recuperarla. Antiloco, que estaba muy loco... Ajax El Grande, que le mató un rebaño berseker de ovejas… a mí, Zeus, como recompensa por haberle honrado en Troya, envió a Hércules a matar a toda mi familia y al llegar sólo quedaba yo, por lo que me hicieron rey. No como a Agamenón, que al llegar a Argos… lo mató un marica. No de que fuera flojo, sino que era homosexual. Que yo no tengo nada contra ellos, ¿eh? Estamos en el 3000 antes de Cristo y aquí cada uno es libre de hacer lo que quiera con su vida, pero…”.
“Ehm… ¿Y Ulises?”, le interrumpe Telémaco.
“¿Ulises, dices?”, responde el rey, confuso, “Pues… no. No recuerdo a ningún Ulises. No estuvo en Troya, eso te lo aseguro”.
“… Mi rey, creo que habla de ese tipo que inventó el Caballo e hizo todos los planes y básicamente ganó la guerra de Troya él solo”, le susurra uno de sus guardias reales al oído.
“¡Ahh! Ése Ulises”, dice Nestor, “El rey de Ítaca, el de prodigiosa inteligencia, el protegido de la diosa Atenea… ¿Ese dices?”
“¡Si, si! ¡Ése!”
“No sé donde está. Tendrás que preguntar a Menelao, el rey de Esparta”, comenta el rey.

“Pero espera, te acompañará en tu búsqueda mi querido hijo Pisístrato, que fue el único que sobrevivió a una reciente invasión de 5.000 persas. Ni uno solo se atrevió a tocarle”.
“¡Oh! ¡Debe ser entonces un guerrero poderosísimo!”, exclama Telémaco, impresionado.
“Si, bueno… también es que se meó encima.”

Más sobre el fabuloso viaje de Telémaco a Esparta... mañana!

sábado, 26 de junio de 2010

La Odisea, Parte 1

Lo cierto es que si algo podemos decir de Homero (aparte de que su nombre rima con “perchero”… que es algo que no viene a cuento, pero que podríamos decirlo. Y que además, sería verdad) es que es el puto amo. No tuvo bastante con tratar sobre los dioses griegos, sino que en esta obra aún tiene la sabiduría suficiente para hablarnos de los dioses nórdicos y toda la pesca. Por tanto, comencemos ya esta historia sobre Thor y sus amig… ¿uh…?

Un momento… ¿¿Este poema no trata sobre Odín?? ¡¡Me han timado!! WHAT THE FU--!!


LA ODISEA, PRELUDIO

Nuestra historia comienza diez putos años después de la guerra de Troya. Teniendo en cuenta que la guerra de Troya duró también diez putos años, Telémaco, el hijo de Odiseo, que cuando su padre se fue era un niño de teta, ahora ya tiene veinte años, ha fumado porros y tiene suficientes pelos en los cojones para que un accidente con la bragueta pudiese resultar fatal.

Como algunos recordarán, los dioses habían castigado a los héroes griegos por lo buros que habían sido en Troya, especialmente por lo mal que habían tratado a la familia real troyana (porque matar cientos y cientos de habitantes indefensos, eso no importa, lo que importa es lo mal que trataron a la familia real).
Resumiendo, mataron a todos los hombres y se llevaron como esclavas a todas las mujeres (nosotros deberíamos aprender!). De la familia real troyana, de hecho, solo quedó un bebé heredero, el hijo de Héctor, si mal no recuerdo (han pasado miles y miles de años). Los griegos tenían dos opciones:

Criarlo como uno de los suyos y que fuese un buen rey pacífico en el futuro… o tirarlo desde lo más alto de las murallas, que es lo que Ulises hizo. Si, ése es el maravilloso héroe de nuestra historia, un puto asesino de niños. Pero bueno, en su defensa diré que imaginad cómo serían los otros griegos, ya que se supone que Ulises ha pasado a la historia como EL LISTO DEL GRUPO, QUE BUSCABA SOLUCIONES INTELIGENTES A LOS PROBLEMAS.

CANTO PRIMENS

Como decía, el castigo de los dioses a Ulises fue que le enviaron unas mareas extrañas en el Mediterráneo que acabó más perdido que un hijo de puta en el Día del Padre. De hecho, lleva ya un chorrón de años en la isla de la ninfa Calipso, donde sólo hace que folletear todo el día y dormir un montón de siestas, para así poder seguir folleteando durante la noche (uhm… interesantes castigos que tienen los dioses griegos…).

Atenea, apenada por el cruel destino de nuestro héroe (¿¿??), decide que es momento de que vuelva a casa. Para ello se convierte en MENTOR y acude a Ítaca (la isla de donde era rey Ulises), para instar a Telémaco de que busque noticias sobre su padre (…ya que en diez putos años de ausencia, el niño no se había ni molestado a intentarlo). El espectáculo que MENTOR se encuentra allí es demencial…

Mentor. FOTO DE ARCHIVO

La mujer de Ulises, Penélope, está rodeada de un montón de pretendientes, que se han lanzado como buitres sobre ella para convencerla de que Ulises ha muerto, y de que se ha de casar con uno de ellos (da igual cual, tienen una Mente Colmena).
Pero no son ni uno ni dos, ni siquiera una docena… sino 108 putos zánganos que no hacen más que celebrar festines y fiestas y están consumiendo alarmantemente rápido TODOS LOS RECURSOS NATURALES DE ÍTACA (en serio).

martes, 22 de junio de 2010

El debate de las energías: La opinión del Señor Malentendidos

Me gusta la energía nuclear. La energía nuclear nos ha dado multitud de superhéroes, aventuras, y es el arma definitiva contra las invasiones extraterrestres y los desastres naturales (Stargate, Independence Day, El Núcleo, Armageddon: al final la bomba nuclear lo soluciona todo).

¿Energía nuclear... o energía "nucelar"?

Además, la energía nuclear es una energía limpia. Vaya que si lo es. Si la dejas suelta, lo barre todo. Limpia hasta lo que está limpio, no deja nada. Sólo un fantasmal brillo fosforescente.
Y eso me recuerda que la energía nuclear nos ha dado también Fallout 3 y todos los demás ambientes post-apocalípticos, ya que lo más parecido a un mundo post-apocalíptico en el que se hubiesen usado bombas convencionales sería el Buscaminas: un sitio pelao todo gris de ceniza lleno de bombas sin detonar esperando que las pises.
¿Y los Simpson? Si no fuese por la central nuclear de Mr. Burns, Homer tendría un trabajo mucho más cutre (en la Bolera de Springfield, lo más probable), que le haría ir tan corto de pasta que seguramente no podría vivir sus alocadas desventuras. Y alguno de sus hijos habría sido dado en adopción o habría muerto de inanición.

Pero, a pesar de todo esto, la energía nuclear ha recibido muy mala prensa, promovida por esas auténticas basuras corporacionistas llamadas “energías renovables” que, para empezar, no lo son. La energía solar, que se supone que es la estrella de estas energías, no es renovable.
De aquí a 11.000 millones de años o así, cuando se apague el Sol, la energía solar SERÁ COMPLETAMENTE INUTIL.
Por tanto es absurdo gastar dinero y esfuerzos en investigar una energía como esa, que tiene los días contados.

¿Energía solar... o energía de un solar?

El petróleo, en cambio, al estar hecho de algas y otras formas de vida prehistóricas (¿Cómo? ¿Qué nuestros coches funcionan con cadáveres de dinosaurio? ¡Somos los putos amos! ¡Normal que no queramos los coches eléctricos!), sí que es una energía renovable, ya que siempre podemos esperar miles de años a que haya nuevos fósiles, hechos de las plantas y los seres humanos que viven hoy.
Usaríamos cadáveres humanos para hacerlo todo: combustible, plásticos, jabon… un poco casi como los nazis, ¿no?

Las otras dos estrellas de la energía renovable son la energía hidroeléctrica (que está muy bien de momento… pero ya veremos qué pasa cuando nos hayamos bebido toda el agua del planeta) y la eólica, que se capta con esos molinos gigantes que hay en sitios con mucho viento.
La energía eólica presenta muchísimos problemas, el primero de todos es que si los molinos esos gigantescos los hubiesen hecho de cartón o tela o cualquier mierda que no fuese metal, sería más fácil que los moviese el viento, no como ahora que no se mueven si no sopla un jodido tifón de esos que arrancan las casas de cuajo. Así están los putos molinos esos, que apenas se mueven y no producen ni para media partida al Zelda de la GameBoy, aunque sea con la vieja.
Está claro que los que pensaron en la energía eólica sobrevaloraron el poder del viento. Es como el Lobo de los 3 cerditos, ahí también está sobrevalorado el poder del viento. Porque una caja de paja, si está mal montada y pones mucho empeño, quizá si que más o menos la puedes desmontar, pero una casa de madera como la del segundo cerdito YA TE DIGO YO QUE NO LA MUEVES. Para destruir una casa de madera de un soplido hay que tener unos cojones increíbles, aparte de los pulmones de Conan.

¿Energía eólica o energía...? euh... bueno, da igual.

El resto de las energías renovables son realmente inútiles y no vale la pena pensar mucho en ellas. Una es la energía geotérmica, una mierda de ciencia ficción que se supone que utiliza el poder interno de la Tierra.
La otra es la energía mareomotriz, que captura la energía de las olas. Eso, además de poner en serio riesgo la noble práctica del Surf, la convierte en una energía muy, muy gay, casi tanto como una energía que utilizase “el poder del amor” para suministrar energía a las cosas.

¿Energía mareomotriz... o energía de un mareo motriz?

Como en tantas otras cosas, yo tengo mi propia solución: colocar generadores eléctricos en las máquinas de los gimnasios. Así los ecologistas, en lugar de plantar un árbol o reciclar su propia mierda para convertirla en un florero o algo así, se pasarían el día haciendo pesas, inflándose con toda clase de batidos de proteínas y drogas que les permitiesen ser más y más fuertes, para producir más energía y así estar salvando más medio ambiente.
Las protestas de Greenpeace cambiarían radicalmente con todos esos locos cachas llenos hasta el culo de esteroides y sudando testosterona en cantidad industrial... Vaya que si cambiarían...

Y probablemente serían así...

jueves, 17 de junio de 2010

Stupid SCIFI Tales #1

El robot-tabernero continuaría un milenio más con su inmemorial tarea, una tarea que había empezado eones antes de que el primer Gelferb, la raza de reptiles que habían sustituido al hombre cuando su civilización fue destruida por un virus mortal. Y seguiría todavía cuando el último calamar anfibio gigante, las criaturas que habían sustituido a los Gelferbs como especie dominante, languideciese un millón de años más tarde en las costas de su ciudad terráquea más importante, Yhgwwngpzhggnttfblrwsfdlbrgrrrt (es posible que la palabra no pueda ser apropiadamente pronunciada si se carece de tres bocas trilabiales colocadas una encima de la otra o bien suficiente destreza a la hora de emitir mensajes sonoros mediante el uso del ano).

Desde hacía tres milenios, una vez cada medio siglo un calamar adolescente entraba en la profundísima gruta donde se encontraba la taberna del robot-tabernero. El robot siempre decía lo mismo al Elegido: “¡Bienvenido al Tornillo Quebrado, ¿en qué puedo servirle?”. Lo cierto es que los calamares no entendían nada del refinado ingles del robot-tabernero (le daba cierto aire señorial, según sus creadores originales), pero la frase había cobrado gran importancia en la intrincada y compleja religión de los calamares (y antes de comenzar a burlaros de ellos por eso, recordad que en las nuestras no solo una, sino todas, carecen de sentido).
El robot-tabernero estaba aliviado de que los calamares mutantes no supiesen hablarle… ¡si le hubiesen pedido whisky, no hubiera sabido qué darles! ¡Sólo le quedaba una extravagante combinación de tequila y ponche de huevo! Por alguna razón, nadie en todos los millones de años desde que él existía había pedido eso…
Pero en fin, al robot-tabernero nunca le faltaba trabajo. Como ya he dicho, tenía una tarea que cumplir.

Dicha tarea era la de frotar los vasos para dejarlos bien limpios con un paño mohoso. Llevaba eones realizando esa tarea… el paño sólo había resistido trescientos años antes de desintegrarse, por lo que el robot siguió frotando con su mano metálica. Apenas doscientos años después, ya no quedaban vasos que frotar, pero eso no le había detenido, oh no. Su mecanismo y el compactísimo metal que cubría su cuerpo habían sido hechos para durar una eternidad. Para eso y para obedecer ciegamente. Era un logro viviente de una raza excepcional ya extinguida, una raza que había dominado los misterios de la ciencia y el universo, que había descubierto el vuelo espacial y la mecánica cuántica, entre otras muchísimas cosas… pero que había sido incapaz de dotar al robot-tabernero de un chip que le indicase CUANDO PARAR A TIEMPO.

Porque quedarse sin paños y sin vasos no había detenido al estúpido robot-tabernero, por supuesto que no. Sus órdenes eran frotar, y frotar es lo que haría, aunque tuviese que frotar eternamente el suelo de la taberna. De hecho, eso es lo que había hecho, había seguido frotando.
Pero no una pequeña cantidad de tiempo, no es como si hubiese estado años haciendo eso… quiero que penséis una cantidad abominable de años, un uno con tantos ceros como podáis imaginar. Ese tiempo era el que el robot-tabernero llevaba fregando el suelo.
Había hecho un agujero en el suelo de la taberna, a base de frotar y frotar. Un agujero que se hundía más y más en las profundidades de la Tierra. En sólo dos millones de años llegaría hasta el núcleo terrestre, haciendo reventar desde dentro el planeta entero. Oh si, ese sería el final del planeta Tierra. No habría juicio final, no habría nada…

Sólo un robot tarado que había escarbado y escarbado hasta joder el planeta entero.

martes, 15 de junio de 2010

domingo, 13 de junio de 2010

URSS: Ascenso y caída.

Al principio, Rusia era el hermano retrasado de las naciones europeas, ese que encierran en una torre y nadie más vuelve a hablar de él. Si, amigos, Rusia era un pedazo de mierda enorme que nadie quería. Nadie… excepto un tarado llamado Lenin, porque donde todos veían un cagarro lleno de piojos colgando del culo de Europa, Lenin veía un lugar con muchas posibilidades.

Con la promesa de sacar al gobierno ruso de enmedio, Lenin llegó a Rusia desde Alemania. Cómo cojones había acabado allí Lenin no lo sé, quizá lo construyeron ahí. Quien sabe.
Pero Lenin no estaba sólo, porque al poco tiempo se le unirían otros dos mendas que querían liberar Rusia: un bruto muy fuerte llamado Stalin y un científico loco de nombre Trotsky (bueno, lo de la formación científica de Trotsky no es algo que reconozca la historiografía oficial, pero yo sí, y me baso en que tenía unos pelos de loco similares a los de Einstein o Nikola Tesla).
Juntos, los tres formaron una especie de superequipo revolucionario que conquistó todo el país en poco tiempo.
Bueno, quizá también les ayudó el hecho de que ahí en Rusia había un Zar muy odiado con nombre de gato, Nicolás II, que básicamente es como un rey pero con más licencia aún para ser un gilipoyas. Exactamente no se cual era el problema que tenía la gente con el Zar, de hecho creo que se quejaban de cosas que no eran culpa suya.
Zar, ¡hace mucho frío!”, le decían, “Zar, ¡no tenemos comida!”.
¿Quién coño se pensaban que era el Zar? ¿El puto tío del Age of Empires, que tenía que seleccionarlos y clicar encima de un arbusto o algún animal salvaje que corretease por ahí para que supiesen que deben matarlo y alimentarse? ¿Se pensaban que el Zar era como Jesucristo, que podía multiplicar los panes, los peces y las botellas de vodka para que hubiese para todos, o qué mierda?
Pensando así, el Zar, en su sabiduría, hizo abrir fuego contra las masas que protestaban frente al palacio, causando multitud de muertes (y así se podrían comer los cadáveres de los muertos, ¿lo veis? ¡Viva el Zar!). Dichos hechos se conocen como el Bloody Sunday (el Sábado Boludo).

El puto Super Street Fighter II de la SNES estaba plagado hasta el culo de propaganda comunista...

En resumen, que después de unas cuantas peleas, Lenin conquistó Rusia: para ello sólo tuvo que quitárselo al Zar para dárselo al pueblo, y luego, más tarde, arrebatárselo al pueblo para quedárselo él. ¡Es que eligieron democráticamente a unas personas que no le caían bien a Lenin! ¿Cómo se atrevieron? ¡Después de todo lo que él había hecho por ellos!
Pero Lenin no pudo disfrutar de su liderazgo absoluto sobre un país que cuando hiela se puede patinar de una punta a otra, porque se puso enfermo y murió. (O se le acabó la batería, una vez había ya cumplido con su misión).

Ahí se liaron bastante las cosas, porque Stalin y Trotsky pelearon encarnizadamente por el poder al cargo del Partido. Con “pelearon encarnizadamente” quiero decir que Trotsky salió corriendo y Stalin lo mató con un piolet lanzado a distancia. Fue una batalla épica.
Para aquél entonces la cosa ya estaba tomando la forma de la Unión Soviética y, ¡oh chico! ¡Qué país! ¡Ahí si que sabían construir naves espaciales!
El caso es que con Stalin al poder, y sobretodo haciendo un frío de cojones fuera, a los soviéticos les fue fácil ganar la Segunda Guerra Mundial, sobretodo porque los alemanes no eran capaces de ser congelados y permanecer en hibernación, para descongelarse luego cuando llegase el verano y forman un ejército invencible (damnit, Hitler, ¿por qué no pensaste en eso?).

Así, tan sólo habiendo sacrificado 22 millones de rusos, los nazis se rindieron, imagino que porque ya no les quedaban balas, aunque si nos ponemos a hablar de escasez de armamento, es mejor que recordemos la escena del Call of Duty 2 donde los soviéticos llevan patatas en vez de granadas.

¡Uy, y eso no es nada! Para que te dieran un cargador para el fusil tenías que ser del Partido y hacer cola dos putas semanas delante del centro de aprovisionamiento.


Bueno, ¿qué más puedo decir de Josefo Stalin? Fue uno de los precursores del retoque fotográfico y el photoshopeado de imágenes. Con ello se borraba el culo y se realzaba el bigote, logrando quitarse hasta un máximo de 10 años en las fotografías, dependiendo de la calidad original. También le gustaba ponerse en fiestas y lugares en los que nunca había estado (o quizá se manifestaba astralmente gracias al poder de la mente).
Aunque oficialmente era ateo, hay que reconocer que Stalin tenía muchos poderes tradicionalmente atribuídos a los seres divinos. Por ejemplo, podía hacer desaparecer de la existencia a una persona, como si nunca hubiese existido, tan sólo con desearlo.
BUSCA LAS 7 DIFERENCIAS:
OMG ROFL!! AMAZING!!
La única explicación es que Stalin lo empujó para que se cayese al agua...
Cuando no quería matarte, pero quería que aprendieses la lección, Stalin temandaba a Siberia. La mala prensa ha hablado muy mal de esto, pero lo cierto es que no era un castigo ni la mitad de malo como lo pintan. Vale, si, es cierto que allí hacía un frío de cojones... ¡pero también lo es que los soldados rusos te ponían de inmediato a hacer trabajos forzados para que estuvieses en movimiento y calentito!
Después de Stalin vinieron otros líderes soviéticos de menor importancia, que no merecen ni que hablemos de ellos. De hecho, este párrafo entero es una aberración. Leerlo os convierte automáticamente en traidores. Por favor, acudid cuanto antes a vuestro centro de vigilancia de la KGB para ser ejecutados de inmediato. Gracias por vuestra colaboración.
El final de la URSS sucedió con la caída del Muro de Berlín. El país se desmanteló en un mondongo bien gordo (Rusia) y una serie de países minúsculos y enanos llenos de gente extraña que se casa con miembros de su propia familia.
Dicho final fue motivado por Gorbachov, el último Secretario del Partido que hubo en Rusia. Puede que penséis que eso de que un tío solo se cargó un país es de locos, pero el hecho de que en más de 40 años nadie fuese capaz de decirle que le había cagado una paloma en la cabeza ya os da una muestra del poder y temor que despertaba ese tío en el corazón de todo el mundo, y así él y su caca cerebral pasaron a la historia como los destructores de la URSS.
Gorbachov podía obligar a cualquiera a hacer cualquier cosa. Era el puto amo... y lo sabía:

Pero estaba claro por qué tenía que desaparecer la URSS, al menos para mí. La carrera competitiva contra los Estados Unidos ya tenía desde hace años un claro vencedor... La URSS, claro. Los soviéticos habían inventado el Ak-47 y tenían al luchador más poderoso de todos los tiempos: Zangief, el ciclón rojo.
¿Qué tenían los americanos? Nada. Sólo a Ken, que era un gay, a Guile, que gastaba más en gomina de lo que producía en sonic booms y a Balrog, que no sabía ni dar patadas el muy inútil. Ya no había reto.

martes, 8 de junio de 2010

6 Finales de LOST que no hubiesen decepcionado a nadie

1. La Isla es R’lyeh y contemplamos el alzamiento del Gran Cthulhu

2. Todo era un sueño del Nobita, que estaba en coma.

3.La cámara se aleja súbitamente y un narrador nos indica que “… y vivieron felices por siempre jamás.”

4.La pantalla se pone en negro a media frase durante una escena supuestamente insignificante de conversación. No volvemos a saber nada sobre La Isla y sus habitantes.

5.Se reúnen en una sala. Va a ser explicado el enigma de la Isla. En ese momento, irrumpe Otto en la habitación, gritando: “¡¡Hola a todos, viva el surf!!”. El resto del capítulo (25 minutos aprox) son los personajes practicando surf y otros deportes playeros, con música veraniega de fondo.


6. La Isla se hunde repentinamente en el mar, todos mueren ahogados. ¡Resulta que era una tortuga gigantesca dormida, que iba flotando por ahí! ¡Por eso no la localizaban y se podía mover y todo! ¡¡Os dieron pistas por toda la serie, idiotas...!!


PD: Si esperábais que me comiese la olla poniendo seis explicaciones fabulosas sobre el origen de la serie que solventaran todas vuestras dudas y os dejase bien tranquilos pensando que la serie es magnifica... vais apañaos.

No lo han hecho los verdaderos autores de la serie después de que les hayáis estado pagando un montón de pasta durante años, lo voy a hacer yo gratis...

lunes, 7 de junio de 2010

Top 5 Incongruencias de Jesucristo

1. Reclutamiento de Pedro.
¿Cómo dicen que sucedió?
Jesucristo se acercó a un pescador que estaba arreglando sus redes y le dijo: ¡Hey! Estoy pensando en formar una nueva secta por aquí. Tú podrías dedicarte a captar idiotas para que nos diesen su dinero y tal, serías mi “pescador de hombres”.

La realidad:
Si Jesucristo se hubiese acercado a un hebreo de esa época y le hubiese dicho “Tú eres pescador, ¿no? Pues a partir de ahora vas a pescar hombres”, Pedro enojadísimo le hubiera matado a navajazos allí mismo y hubiese contestado a gritos: “¡A mí maricón no me llama ni tu puta madre!”.

2. Resurrección de Lázaro
¿Cómo dicen que sucedió?
Le dijeron a Jesucristo que su amigo Lázaro, había muerto. Jesucristo abrió su tumba y tras decirle “Lázaro, coño, levántate ya y anda”, Lázaro resucitó.

La realidad:
Jesús dijo: “Lázaro, ¡levántate y anda!”. No pasó nada. Jesús, tras un segundo de incertidumbre y balbuceo, dijo: “Oh, ¡mirad! ¡E-está vivo! ¡Vaya que si lo está!”.

“¿Qué dices, Lázaro?”, siguió Jesucristo, “¿Qué estás muy bien en tu tumba y no quieres salir que te da vergüenza? Ok…”. Jesús movió las manos, indicando a las gentes allí reunidas que ya se podía ir, que el milagro había sido obrado. La gente no se marchaba.“¡Que os larguéis, coño!”, gritó finalmente el Mesías.

3. Exorcismo de los gadarenos (Mateo 8:28-8:32) PD: Los numerillos estos significan la hora a la que fueron escritos los diferentes apartados de la Biblia.

¿Cómo dicen que sucedió?
Jesús se encontró con dos endemoniados que eran las fuerzas del Mal y nadie les podía detener. Jesucristo les golpeó con sus puños, les arrojó volando por los aires y finalmente hizo chocar sus cabezas la una contra la otra.
Los demonios le pidieron que no los matase, que les enviase a otro cuerpo. Jesús les envió a un montón de cerdos que había por allí pastando tranquilamente. Los cerdos salieron huyendo de Jesús y se cayeron por un precipicio. Gilipoyas...

Además los cerdos eran el único alimento de la gente que vivía ahí. Al poco murieron de hambre todos. Gracias, Jesús.

La realidad:
Los cerdos salieron corriendo, si… pero en la dirección contraria, es decir, DIRECTOS HACIA JESÚS.
Jesús desapareció entre una marea de colmillos y dentelladas, gritando: “¡SÁLVESE QUIEN PUEDA! ¡NADA PUEDE DETENERLOS! ¡NADA PUEDE DETENER A ESTOS PUERCOS VIOLENTOS!”.

4. La última cena.
¿Cómo dicen que sucedió?
Jesucristo celebró una última cena con sus discípulos. Cogió pan y vino y les pidió que lo comieran, que simbólicamente eran su sangre y su carne.

La realidad:
De simbolismos nada. Prefiriendo una muerte rápida que el suplicio de la cruz, convenció a sus amigos para que cometiesen un horrible, horrible acto de canibalismo.
“Jesús está en todos nosotros” fué verdad en ellos de la manera más literal posible.



5. La muerte en la cruz
¿Cómo dicen que sucedió?
Crucificaron a Jesús y éste murió para salvar a la Humanidad de sus pecados.

La realidad:¿Que murió? ¿Estás de coña? ¡Era el jodido Jesucristo!

viernes, 4 de junio de 2010

El bizarro episodio bíblico de Epsilon (Mt 3:16)

Se logearon unos niños para que Él los admitiese, pero los discípulos los banearon.

-Dejad que los niños vengan a mí, no se lo impidáis – posteó el CiberCristo – Con ellos formaré el ejército que ha de sustentar mi Reino sobre la Tierra.
-Pero, santo Ciber-Cristo – hizo reply Pedro - ¿No os haría mejor servicio la fuerza de los guerreros púberes de Judea? Cientos que hacen cola frente al templo…

-Silencia tus palabras, oh desdichado – unlikeó el CiberCristo lo que Pedro procesaba- ¿Acaso no has visto a los niños recibir castigos que habrían quebrado a sus padres? No temáis: hacer de un niño un soldado para los hombres es imposible, pero no para el Santo Dios-Tech, porque es Admin, y para él todo es posible...

Pedro se mantuvo en stand-by.
-¿Aún no te has convencido, insolente?! – Hizo reply de nuevo el CiberCristo frente al incrédulo Pedro, y sus alumnos se acercaron para leer el log de mensajes anteriores– En verdad os digo que su juventud permite aplicar sobre ellos las modificaciones sacras que enloquecerían con un organismo más desarrollado.

Y mientras decía, alzó el CiberCristo a uno de los infantes con sus brazos mecánicos.
-Nuestra carne, es carne del Mech-Señor –contestaron los niños.

-Bien. Ea, pues, he aquí mi ordenamiento – habló el CiberCristo, obrando – La carne es débil: su piel, de acero será hecha. Le sacaré los brazos, quitaré toda la carne. Entonces, haré descender el Spiritus Autommaton sobre él: El ojo irá fuera, pues el sensor le hará más bien, y así podrá ver no sólo lo que es, sino también lo que casi es. No blandirá más inofensivos palos que tome del suelo. Blandirá la sierra motorizada del Señor. Así os digo: Hágase la tenaza donde había mano.

Acabado el prototipo, Yesooh_69 miró su obra y vio que lo que había hecho era bueno.
-Nuestra carne, es carne del Mech-Señor – contestaron los niños.

miércoles, 2 de junio de 2010

Starbucks: mi perorata personal.

Cualquier Starbucks es un sitio raro de cojones, siendo una de las muchas razones de esta rareza el hecho de que repiten productos en el menú para que parezca que tienen más de los que realmente tienen (o si no, que me expliquen la diferencia entre el Café Latte y el Café con leche).
Lo que pasa es que no hay mucho que innovar en el mundo del café. Es como las patatas fritas, que sólo pueden hacerse las normales y, como mucho, darles sabor barbacoa o sabor kétchup a base de mezclarlas con ganchitos y dejar el aceite de freír al sol para que se ponga rancio.
Por eso me raya que digan que lo que permitió expandir Starbucks por todos los lados del mundo fue “reinventar el concepto del café”. Bueno, primero de todo es que los conceptos no pueden reinventarse ni transformarse, eso para empezar, que llevamos muchos años de exitosa cultura occidental para comenzar ahora a darle la espalda a Platón por unos putos cafés de mierda.
No han reinventado nada: el café, por muy del Starbucks que sea, sigue siendo agua con granos de café molidos (o que le hayan puesto un rato un calcetín sucio en remojo).
Y si quieren, luego le ponen leche o canela o especia, o azúcar moreno o semen de caballo, pero no han “reinventado” nada, lo único que han hecho es servírtelo, en vez de en tacilla, en un vaso de plástico o cartón o no sé de qué mierda es, que es tan grande que te hace venir cagaleras luego. Y así se ahorran lavar la tacilla.
De toda la vida han existido cafeterías (y que yo sepa, no se necesita el LHC y ser un jodido técnico nuclear para hacer café), y no te lo vendían a precios como los de la Coca-cola en el cine (que por el precio se diría que la hacen con sangre de unicornio).
Eso último tiene menos excusa aún, considerando que en los Starbucks se pagan sueldazos que son, imagino, ligeramente superiores a quien trabaja en un McDonalds o un Bocata, pero todavía por debajo de un esclavo asalariado en un taller ilegal de costura en Hong Kong.

No. Lo que hacen los de Starbucks es darte sillones cómodos. Eso es lo que ofrecen. Sólo ponen una barra para servir cafés allí y la gente se siente culpable de entrar y no tomar nada y se pide un café. Eso es todo. Igual que las religiones, el truco de su negocio es explotar del sentimiento de culpabilidad de la gente.Porque, si no, ¿para qué demonios querría alguien un café a media tarde? ¡El café es para mantenerse despierto, narices, no para tomarlo a media tarde como si fuera un refresco! Es tanto como que alguien venga y te diga: “Ahora que voy ya borracho perdido, me voy a meter unas rallas de coca, que tengo que pasarme la última misión del Call of Duty”. ¡No procede! ¡No computa!
En resumen. Que no. Aunque te den WiFi (o sea, cáncer gratis), desapruebo los Starbucks, porque tanto que innovan y tanta mierda y aún no han puesto a la venta el Carajillo, nuestro café nacional por excelencia, que en tamaño de vaso grande de Starbucks tendría tal cantidad de coñac que nos convertiríamos en los nuevos rusos.

Eso ha sido mi reflexion random.