Terremotos: Un negocio aún sin explotar.

[Extraído de Consejos para el buen inversor, en The Economic Times (del 24 de Febrero)]:

Estimados inversores potenciales, en primer lugar, permítanme darles las gracias por su tiempo y atención.
Sólo hay que ver las noticias estos días para darse cuenta de que los terremotos son un producto tremendamente popular en muchas partes del mundo. Sin embargo, en España nunca se ha hecho una propuesta seria para causar, recibir o incluso aumentar los efectos de los terremotos en el territorio patrio.
Puede que uds., como posibles inversores, hayan leído hasta aquí y se estén preguntando: “Bien, está claro que funciona en otras partes del mundo, pero ¿por qué funcionaría aquí?”.

Bueno, para empezar, los edificios de España suelen ser viejos, fueron construidos de manera rápida y barata y, como no es precisamente una zona muy activa sísmicamente, no están preparados para soportar terremotos. Eso quiere decir que en caso de terremoto, la mayoría de edificios del país se caerían a cachos y quedarían completamente destruidos.
Haría falta entonces una larga, larguísima reconstrucción. Harían falta miles y miles de obreros para volver a levantar todas las casas. Habría contrataciones masivas, se recuperaría el sector del ladrillo y saldríamos de la crisis. ¡Salvados! ¡Salvaaaados!
Como pueden ver se trataría, por tanto, del mejor negocio inmobiliario desde que los pitufos descubrieron las setas.

Déjenme ser el primero en decir: "Terremotos en España, ¡ya!" Es algo que necesitamos urgentemente. Por eso, les pido que tomen la unica opción inteligente: Meter todo vuestro dinero y los ahorros de vuestra vida en la construcción de la máquina de terremotos del Dr. Terroríficus.
Lo que saque extorsionando al gobierno de los Estados Unidos, nos lo repartimos entre todos.